Qué ver en Mérida en unas horas

Hola luniviajer@!🙋🏼‍♀️ Hoy te traigo el primer post de la CC.AA de Extremadura, qué ver en Mérida en unas horas.

Aprovechando los días festivos con motivo del día de La Constitución y la Inmaculada, organizamos una escapada en coche de cinco días para visitar nuestro país vecino. La primera parada para estirar las piernas y comer fue Mérida.

Salimos desde Córdoba por la mañana y llegamos a Mérida sobre las 13:30, aparcamos el coche en el primer parking que vimos. Parking de Santa Eulalia, justo al lado de la Basílica con el mismo nombre y desde ahí fuimos andando visitando un poco la ciudad.

A continuación te voy a contar todo lo que puedes ver en Mérida en unas horas y mi experiencia en un restaurante de la zona del centro.

Un poquito de historia

La historia de Mérida es fascinante, tanto o más como lo que nos cuentan las ruinas que todavía quedan en pie.

La ciudad fue fundada por orden del emperador Octavio Augusto en el año 25 a. C., para dar cobijo a los soldados de la guerras cántabras, veteranos de las legiones V Alaudae y X Gemina.

Como toda ciudad romana, tenía murallas que protegían la vida de los habitantes, y estaba llena de edificios de espectáculos y ocio públicos (Teatro, Anfiteatro, Circo), además de los Foros, Templos, acueductos y demás edificaciones que poco a poco se fueron adhiriendo en la ciudad, con los edificios de viviendas y las plazas públicas.

Con la llegada de los visigodos la la ciudad siguió manteniendo su importancia, sin embargo, no fue hasta después de la presencia de los árabes cuando comenzó el declive total, quedando prácticamente en el olvido hasta el siglo XX.

Después de 1993 Mérida recobró su importancia y grandeza siendo declarada en el mismo año Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Ahora sí, después de esta breve introducción pasamos a detallar todo lo que puedes ver en Mérida en unas horas. Sigue leyendo para no perderte nada😁.

Qué ver en Mérida

Mérida tiene muchísimo para ver, y lógicamente en un día no da tiempo, pero bueno, con todo lo que he visto ya sé que tengo que volver sí o sí para visitar aquello que no pude.

Basílica de Santa Eulalia

Tras aparcar nos topamos con este gran monumento, la Basílica de Santa Eulalia, cuyo edificio actual fue construido a partir de la reconquista de la ciudad en 1230, sobre los restos de la antigua primitiva iglesia de época visigoda.

De estilo románico, destaca su puerta abocinada, con arco de herradura al que se adosaron arquivoltas y columnillas con capiteles decorados con motivos vegetales y aves.

La entrada cuesta 6€, en taquilla se puede comprar un bono por 16€ que permite la entrada a varios monumentos, incluyendo el teatro romano.

Nosotros no entramos, pues estábamos solo de paso.

Pórtico del Foro

Me quedé alucinada cuando me encontré de casualidad estos vestigios romanos.

Este pórtico formaba parte del antiguo Foro Municipal de Augusta Emerita. Sobre las grandes columnas corintias descansa un ático con metopas en las que se alternan medallones con cabezas de Júpiter-Amón, Medusa y Cariátides portando cráteras.

Al fondo del pórtico en la pared vemos unos enormes nichos para estatuas de personajes relacionados con la historia romana y familiares de Augusto.

Muy posiblemente fue construido a mediados del siglo I siguiendo el modelo del Foro Romano de Augusto.

Templo de Diana

En la calle Romero Leal se encuentra el Templo de Culto Imperial situado al fondo de una plaza.

En esta plaza aun se conservan lastras de mármol de su pavimentación y los muros que la delimitaban. También podemos ver los dos estanques que flanqueaban al edificio. Posiblemente se levantó todavía bajo el poder de Augusto.

El templo en época romana estaba ubicado dentro de una gran plaza conocida como 'Foro de la Colonia', donde se encontraba rodeado de edificios públicos y siendo el centro urbanístico, es decir, aquí tenía lugar la vida política, se administraba justicia, se hacían transacciones financieras y se ofrecían sacrificios en honor a los dioses.

A partir del siglo XVIII fue conocido como Templo de Diana, aunque según varias fuentes, se piensa que estuvo consagrado a Roma y al Emperador.

¿Subirse al tren turístico?

Caminando y buscando el circo y teatro romano encontramos la parada del tren turístico. Al no tener mucho tiempo para recorrer la ciudad y como todavía nos quedaban algunos puntos por visitar, optamos por subirnos al tren (4,50€/ persona e ida y vuelta a pagar en efectivo en el mismo tren).

Nefasta idea, o sea, si estás pensando en coger el tren como hicimos nosotros, no merece la pena. El recorrido es de 30 minutos, y vimos algunos monumentos desde la lejanía, por no hablar de que la explicación que van haciendo sobre la ciudad es un audio grabado.

Total que, subidos desde el tren vimos los siguientes monumentos:

• La Basílica de San Eulalia
• El acueducto de los Milagros: conocido así por la admiración que causaba en lugareños y forasteros su estado de conservación a pesar de los avatares del tiempo. Pues se conservan más de ochocientos metros de este acueducto.

• La Alcazaba: el legado árabe de la ciudad. Es la fortaleza defensiva musulmana más antigua de la península. En su momento tuvo hasta 20 torres. Ahora solo quedan 2 de época cristiana.
• Puente Romano: fue la principal ruta de entrada a la ciudad durante muchos siglos. Es más, han estado pasando coches por el puente hasta el año 1991, fecha de inauguración del Puente Nuevo (también conocido como Puente Lusitania), obra del arquitecto Santiago Calatrava.

• Puente Nuevo: creado para peatonalizar el Puente Romano y para unir la Mérida más tradicional (casco histórico) con la ciudad moderna en la otra parte del río.

• Zona Arqueológica de Morerías: donde se pueden ver cloacas, casas de la clase pobre, restos de la muralla romana, calles en perfecto estado, etc.
• Monumento a Octavio Augusto: ubicada en la rotonda de acceso al puente Lusitania por el margen derecho del río Guadiana a su paso por Mérida, encontramos una reproducción en bronce del Augusto de Prima Porta, hallada en Roma. La estatua representa al emperador Octavio Augusto, sosteniendo un bastón de mando consular y levantando la mano derecha, mostrando a sus tropas la corona de laurel como triunfo.

• Monumento a Luperca (la loba capitolina de Roma): este es el nombre de la loba que según cuenta la mitología amamantó a Rómulo y Remo cuando estos fueron mandados matar por el rey Amulio. La figura de la rotonda, está hecha de bronce con 75cm de altura, posteriormente se le añadieron las pequeñas esculturas de los niños Rómulo y Remo, en representación de la leyenda mitológica de la fundación de Roma.

Teatro romano, lo más TOP que ver en Mérida

Indispensable la visita a este monumento romano, nosotros no entramos en esta ocasión pero volveremos.

Fue uno de los más grandes del Imperio Romano. Actualmente, se celebra todos los veranos el Festival de Teatro Clásico de Mérida.

La historia del teatro comienza con su construcción bajo el patrocinio de Agripa, yerno de Augusto, entre los años 16 y 15 a.. C., cuando la Colonia fue promocionada como capital provincial de la Lusitania.

Ya sabemos que los romanos no eran muy aficionados al teatro, pero una ciudad de prestigio no podía no tener un edificio exclusivo para los juegos escénicos.

Este fue bastante generoso en su espacio, pues tenía una capacidad para unos seis mil espectadores. Su distribución de abajo a arriba, según el rango social en tres sectores de gradas, también llamadas caveas summa, media e ima, separadas por pasillos y barreras.

No me voy a extender mucho más en su explicación porque podría estar hablando horas y horas sobre este espectacular monumento, pero destaco también la Casa-Basílica del Teatro.

Situada en la punta oeste de pórtico del Teatro vemos esta vivienda donde se piensa que las estancias provistas de ábsides con ventanas en su cabeceras, formaban parte de una iglesia donde se reunía una de las primeras comunidades cristianas, por eso el nombre de Casa-Basílica.

¿Dónde comer en Mérida?

Entre paseo y paseo paramos a comer en el Mesón Restaurante El Alfarero. Se encuentra en la calle Sagasta, 29. La camarera nos previno del tamaño generoso de los platos del menú, así que optamos por pedir platos para compartir.

El trato no fue muy amable que digamos y bastante caro para la calidad de la comida (37€ incluyendo las bebidas). Pedimos lo siguiente y una tapa de boquerones fritos:

La verdad es que nos paramos aquí porque parecía que tenía buena pinta, pero la realidad fue otra distinta. La comida no estaba mal, pero no de muy buena calidad.

Otro de los sitios que habíamos visto para comer es el Puchero de la Nieta, con muy buena puntuación en Google.

Y hasta aquí nuestra visita por Mérida, ciudad Patrimonio de la Humanidad.

Si te gustan las ciudades romanas no te puedes perder algunos de mis viajes por Tarraco, Ampurias, Baelo Claudia, Roma.