Hola luniviajer@! Hoy te traigo un post dedicado al conjunto arqueológico de Baelo Claudia, localizada en el municipio de Tarifa en la provincia de Cádiz 😍.
Descubrí esta increíble urbe romana situada en el entorno natural de la ensenada de Bolonia, cuando estudiaba 2º de Turismo, a decir verdad, me flipó tanto que no necesité mucho para convencer a mi padre y visitar en verano este yacimiento arqueológico. No te voy a mentir si te digo que desde Córdoba es un viajecito "guapo", unas 3 horas aproximadamente en coche, pero, qué te voy a decir yo si me quedé maravillada al ver el estado de conservación tan magnífico de sus elementos funcionales.
Fíjate si me gustó tanto esta ciudad que decidí hacer mi TFG sobre ella, lo que me llevó a realizar una segunda visita al año siguiente para lo cual, concerté una visita con el arqueólogo del conjunto José Ángel, con el que ahora me mantengo en contacto de vez en cuando. Pero bueno, no me enrollo más. Vamos al lío!
Tabla de contenidos
Situación geográfica
La ciudad romana de Baelo Claudia se localiza en la ensenada de Bolonia, municipio de Tarifa, en el extremo más meridional de la provincia de Cádiz, en el sur de España y de la comunidad autónoma de Andalucía.
Desde el punto de vista físico, el espacio posee un extraordinario interés derivado de su situación geográfica. Dentro de esta ensenada, Baelo se sitúa en el espacio delimitado por dos salientes montuosos, Punta Camarinal y Punta Paloma, formando una magnífica playa natural de arena blanca y fina, que por suerte, todavía hoy apenas está urbanizada.
Por ello, este yacimiento se ha convertido, en los últimos años, en uno de los destinos elegidos en la provincia de Cádiz en materia de turismo cultural y natural. Y no es porque lo diga yo, sino porque como veremos más adelante, es digno de visitar.
El Conjunto arqueológico
Antes de visitar la ciudad romana, nos pararemos en el centro de visitantes, fue construido en 2007. Está compuesto por dos grandes áreas: la parte pública que es donde se encuentra el museo, una sala de actos y una biblioteca; y la parte privada o interna, donde se encuentran los departamentos de conservación, investigación y administración.
Cuando entramos al museo, vemos dos plantas. En la primera, encontramos el área expositiva, donde exhiben exposiciones temporales de pintura y fotografía vinculadas al yacimiento, y una maqueta del mismo. En la segunda, observaremos piezas originales de gran valor, muchas de las cuales han sido encontradas en la ciudad romana.
La ciudad romana
Antes de adentrarnos en la urbe romana, es necesario conocer cosas de ella. Bien, Baelo Claudia fue poblada por los romanos a finales del siglo II a.C., gracias a la existencia de un asentamiento púnico-romano derivado de la segunda y tercera guerras púnicas.
La ciudad, en el transcurso de su existencia experimentó un gran impulsó urbanístico, potenciado por la creación de un puerto marítimo y la edificación de establecimientos públicos, y como consecuencia del desarrollo económico basado en el comercio con el norte de África, las exportaciones a todo el imperio romano, la pesca y la fábrica de derivados de pescado, pudiendo destacar en este sentido las salazones y la elaboración de la famosa salsa garum (muy codiciada por los romanos).
Pero, no solo las actividades que he mencionado antes enriquecían la ciudad, sino también la explotación agrícola y ganadera, tanto para el consumo de la población como para la exportación. Además, obtenían también vino y aceite (este que nunca falte en la dieta mediterránea).
Gracias a las numerosas excavaciones realizadas en el yacimiento, se ha podido concretar que Baelo Claudia desde su origen ha tenido fábricas de salazón y garum. Durante la época de Augusto fue cuando se desarrolló por completo, expandiéndose en dirección norte.
Recorrido por la ciudad
Tras haber visitado un par de veces el yacimiento, te recomiendo que primero visites el centro de interpretación, para que así tengas una mejor visión de lo que vas a ver durante el recorrido por la ciudad romana.
Acueducto de Punta Paloma
Las ciudades romanas requerían de un suministro abundante de agua limpia procedente de fuentes, acuíferos o manantiales, no sólo para uso doméstico y sanitario, sino también para la industria de la salazón, que exigía de grandes cantidades de agua dulce tanto para la limpieza del pescado como para la higienización de los establecimientos. Este suministro vital llegaba a la ciudad a través de acueductos.
En esta ciudad romana, tres fueron los que dieron servicio: el acueducto de Realillo, el de Punta Paloma (que es el que se encuentra en mejor estado) y el del Molino de Sierra Plata.
2. La necrópolis
En época romana, los cementerios se localizaban a extramuros de la ciudad, pues así estaba dispuesto en las Leyes de las XII Tablas: "Que no se entierre ni se queme en la ciudad al hombre muerto". Estas leyes fueron cumplidas en la ciudad a lo largo de varios siglos, excepto en época cristiana, ya que se han descubierto varios enterramientos cristianos dentro de la población, en las termas y en el teatro.
Necrópolis romana
Necrópolis romana
En la ciudad de Baelo Claudia se han descubierto dos necrópolis, una cerca de la Puerta de Carteia y otra al oeste, próxima a la Puerta de Gades.
En la necrópolis tardo imperial (la encontramos al fondo de la ciudad mirando hacia el mar), en junio de 2018, fue hallado un pequeño mausoleo dedicado a Junia Rufina. En él todavía se conservan las inscripciones originales en bronce, y cuatro columnas con cuatro capiteles corintios.
En Baelo Claudia, el rito funerario iba acompañado del proceso de cremación, de comidas funerarias y ofrendas que rodeaban las tumbas. En el post de la necrópolis de Carmona, explico el rito funerario.
3. La muralla Este
En Baelo Claudia se conservan restos de la muralla este que rodeaba y protegía la ciudad. Los restos encontrados se pueden distinguir fácilmente, pues el recorrido está muy bien señalizado.
La primera muralla de la ciudad fue construida en el período de Augusto, observándose todavía un considerable número de elementos: torres, lienzos de muro y puertas en la parte septentrional y oriental de la ciudad. Seguramente, esta construcción está relacionada con el otorgamiento del derecho latino a la ciudad, lo que la convierte en oppidum latinum, por lo que la muralla pasaría de cumplir con su función de protección y defensa de la ciudad, a constituirse en objeto de valor monumental y simbólico. No obstante, cerca de medio siglo después fue reparada y reconstruida.
4. Barrio industrial: factorías de salazones
La actividad industrial y comercial más importante que se desarrolló en la época romana fue la fabricación y producción de salazones, salsamenta, y de garum, salsa de pescado muy apreciada en todo el imperio.
La ancestral pesca del atún (a su paso del "Atlantic" al "Mare Nostrum" a través de las "Columnas Herculis") mediante el arte de la almadraba es el origen fundacional de la ciudad de Baelo Claudia y la creación de su gran industria salazonera.
La actividad industrial que tenía lugar en Baelo Claudia, continúa siendo en la actualidad el gran legado de civilizaciones precedentes, fuente de cultura y riqueza arraigada en las poblaciones cercanas: Zahara de los Atunes, Barbate, Vejer y Tarifa.
Para producir la salsa garum, era necesario que el pescado estuviese completamente descompuesto en sal, variando su calidad según las especies e ingredientes empleados, que podían ser desde hierbas hasta moluscos y gambas. También, era muy común utilizar otros restos de pescado salado, tripas, huevos, sangre, etc. Aunque, el típico garum o liquamen estaba hecho de salmonetes y caballas.
Las fábricas se localizaban cerca del mar y la playa, en el barrio del puerto y en el barrio industrial. El arqueólogo P. Paris excavó cuatro fábricas de diferentes tamaños en la parte baja de la ciudad, tres en la parte oeste de la Calle de las Columnas, y otra en la parte este. Poco después, C. Domergue desenterró otras al sur del decumanus maximus, aunque también se extendían por el oeste.
5. Las domus
Tras la visita industrial, la siguiente parada será en las domus. Estas casas romanas son herencia de las griegas y de las etruscas. Existen distintos tipos de vivienda romana, pero, en general, todas tienen en común la forma rectangular de su planta y la orientación hacia el interior.
Las viviendas se organizaban en diferentes estancias. El acceso a la casa se realizaba por el vestibulum (vestíbulo) que comunicaba con el atrium (patio interior), la sala más importante de toda la casa, ya que en el centro se ubicaba el impluvium que servía para recoger el agua de la lluvia gracias a la abertura en el techo central llamado compluvium. En cada extremo del atrium estaban las cubiculas (habitaciones) tanto de los sirvientes como de los señores de la casa.
Las domus estaban compuestas también de un gran comedor (triclinium) que daba acceso al patio exterior llamado peristylum (peristilo) que era un jardín, a la culina (cocina), al balneum (baño) y a la biblioteca. Por último, estaban las demás salas de la casa tales como el focus (fogón) también llamado hogar y el tablinum (despacho del cabeza de familia)
¿Sabíais que los romanos no acostumbraban a almorzar en sus casas? Lo hacían en las tabernae (tabernas) en las cuales no comían demasiado porque la comida más importante del día para ellos era la cena, y la realizaban en el gran comedor recostados en un triclinium, es decir, no comían sentados.
6. El macellum
Prácticamente en la misma zona de las domus se encuentra el macellum, cuyo edificio estaba divido en dos partes: por un lado, el mercado con las tiendas y con el patio en el centro y, por otro, los alrededores compuestos por pórticos y vestíbulos de orientación norte.
El edificio principal presenta forma rectangular y cuatro tiendas externas, divididas en dos zonas situadas a los lados de la entrada principal, en cuyo centro aún se conservan sus capiteles.
El edículo (pequeño santuario o templete) situado en el centro del patio. dibujaba forma rectangular acabando en una bóveda semicircular. Por su decoración y forma pudo servir como un puesto más, o como un local administrativo de supervisión, o lo que es más probable, serviría como capilla en cuyo interior existiría una estatua. En el fondo verás un pedestal de forma rectangular situado en la parte central cuya función pudo ser la de albergar otra estatua.
7. El foro
El foro se situaba en el centro de la ciudad, bajo el capitolio romano. Está datado en la época de Augusto. En él se localizaban principalmente los edificios públicos, oficiándose incluso actividades esenciales tanto para la ciudad como para sus habitantes, tales como cultos religiosos, reuniones políticas y jurídico-administrativas y comerciales.
Al sur se encuentra la basílica, al oeste el tabularium o archivo municipal y la curia, donde se reunían los decuriones o magistrados de la ciudad, quienes formaban parte del consejo municipal, Ordo Baelonensium, donde se dictaminaban los decretos determinados en el foro, y una sala de votaciones en donde el pueblo se reunía para votar a los magistrados de la ciudad. Por último, hacia el este se encontraban las tabernae o tiendas.
8. La basílica
La basílica pudo haber sido construida en tiempos de Nerón y era el edifico donde se impartía justicia por los magistrados supremos de la ciudad (vamos como los juzgados). Ellos dictaminaban las sanciones civiles y comerciales referidas a causas de menor relevancia; las causas más importantes eran resueltas de forma colegiada por los magistrados, el gobernador y sus delegados.
Encima de un alto pedestal, se eleva la estatua de mármol del emperador Trajano (el original se puede ver en el museo de Cádiz), vestido con la toga y, al lado de sus pies, el cuerno de la abundancia como signo de prosperidad, felicidad y concordia.
Pero no solo se ha encontrado la estatua de Trajano. También se localizaron otras tres más muy cerca de esta que bien pudieran sostener las figuras de otros emperadores o la de algún pariente de la familia imperial.
9. Las termas
Muy posiblemente, las termas principales de Baelo Claudia estarían ubicadas al norte del decumanus del teatro, en la parte posterior de los templos del capitolio.
Estos baños podrían tratarse de baños privados (pertenecientes a una gran domus); baños público y privados a la vez (incorporados también a una domus); o baños de un espacio termal de uso público que abarque algunos espacios adicionales, como una palestra o un pórtico.
10. El teatro
Ya estamos llegando casi al final de la ciudad romana, y en la parte oeste y lindante a la muralla se encuentra el teatro romano, construido entre los años 60 y 70 d.C., (a finales de la era de Nerón y principios de la de Vespasiano). Muy posiblemente fue abandonado en el siglo III y poblado de nuevo por viviendas y una necrópolis cristiana entre los siglos IV y VII.
Las actuaciones que más éxito tenían entre los ciudadanos romanos eran, sin duda, las comedias, los espectáculos de mimos y las danzas.
Entre todas las partes del teatro que lo conforman, podemos resaltar la cavea (graderío semicircular), la maeniana (sectores de grada) formada por nueve vomitorios que facilitaban el acceso de los asistentes a sus localidades. La scanea que es donde tenían lugar las actuaciones y los tribunalia que eran los palcos reservados donde se sentaban los que organizaban las actuaciones para el emperador o su representante.
11. Triada capitolina (Minerva, Júpiter y Juno)
En uno de los siete promontorios (en el Capitolium) de la ciudad de Roma, fue construido el primer templo de Júpiter Óptimo Máximo. Estaba compuesto por tres cámaras destinadas a Júpiter, Juno y Minerva y simbolizaba el culto máximo del Estado.
El origen del capitolio se romana al periodo etrusco, cuando el templo se instalaba en la parte más elevada de la ciudad.
En Baelo Claudia el capitolio también fue construido al norte de la ciudad, en su zona más elevada. Su construcción, después de las excavaciones arqueológicas, se ha datado en la época de Nerón. Las tres naves son independientes y están separadas entre sí. Eran tetrástilos y pseudoperípteros, es decir, estaban formados cada uno por seis columnas y nueve pilastras. En cada templo se encontraban las estatuas de los tres dioses, siendo la nave del centro para Júpiter, ya que era el único señor del templo, a su derecha estaba la de Minerva y a la izquierda la de Juno.
12. Templo de Isis
Llegamos ya al final del recorrido por la urbe romana parando en el Templo de Isis. Al oriente del capitolio, se ubica el segundo templo más importante de la ciudad, el que corresponde a la diosa griega Isis, esposa de Osiris. Frente a la entrada del templo se hallaron dos inscripciones destinadas a "Isis, la Señora" (Isidi Dominae).
Sólo se podía acceder al templo por una entrada compuesta de una escalera alargada, la cual es fácilmente observable en la actualidad. La nave estaba compuesta por los cinco espacios de los Isea: el pórtico, el patio, el mismo templo, las alcobas de los clérigos y una sala de iniciación en la parte trasera del edificio). El templo fue construido en el año 70 d. C., y destruido y abandonado a mediados del siglo III d.C.
Y, hasta aquí termina este post sobre el Conjunto Arqueológico de Baelo Claudia. Es un destino que recomiendo visitar, al menos, una vez en la vida, porque, sin duda, la visita lo merece. A continuación, te dejo información de interés sobre actividades y sus redes sociales (publican muchas cositas interesantes).