Hola luniviajer@s!🙋🏻♀️ Hoy te traigo un post sobre qué ver en Cuenca en un día.
En agosto papín y yo nos fuimos de escapada padre e hija a Cuenca. Sí, hay muchos lugares para visitar pero, es que Cuenca es Ciudad Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde 1996 y ninguno de los dos había estado.
Cuenca, capital dela provincia homónima y perteneciente a la Comunidad Autónoma de Castilla La Mancha, se encuentra a unos 430 km de Córdoba y hay tres rutas diferentes para ir, nosotros decidimos ir por la E-903 desde Valdepeñas, pasando por Tomelloso.
Si quieres saber más sobre esta ciudad y mi aventura, sigue leyendo que te lo cuento.
Tabla de contenidos
Un poco de historia de Cuenca
Cuenca, como ya he comentado al principio, fue declarada Patrimonio Mundial por ser ejemplo excepcional de ciudad fortificada medieval, conservando su entorno original intacto.
Sin olvidar tampoco su perfecta unión entre la parte histórica de la ciudad con el paisaje natural, dominado por las hoces de los ríos Júcar y Huécar, en que se encuentra ubicada.
Cuenca se remonta a la época islámica funcionando como foco defensivo y lugar estratégico en el centro del Califato de Córdoba.
Con la conquista de la ciudad por Alfonso VIII de Castilla se inicia una nueva etapa para esta en 1177; el consiguiente aumento de su población, con el asentamiento de poblaciones cristianas y judías, tuvo su reflejo en el urbanismo y en la construcción de nuevos edificios, como la Catedral, primera de estilo gótico construida en España.
La economía de Cuenca se focalizó en la industria textil, de gran renombre durante los siglos XV y XVI, lo que provocó una gran actividad constructiva.
Dentro de la industria textil, lo que más destacaba era la confección de paños, cuya actividad se hundió en el siglo XVII lo que conllevó a una drástica pérdida de población, que poco a poco se fue recuperando a lo largo del siguiente siglo.
Y ahora sí pasamos a qué ver en Cuenca en un día👇🏻.
Qué ver en Cuenca en un día
Si se dispone de poco tiempo, Cuenca es perfecta para verla en un día bien aprovechado. Nosotros reservamos un free tour con Civitatis para conocer la ciudad de la mano de un profesional (Celia) y así fue.
A continuación, te cuento lo que vimos, pero antes, recomendación gastronómica😋.
Como estábamos un poco cansaditos y con ganas de comer, pues llegamos sobre las 14:00, decidimos pararnos en el bar al lado de la Santa Iglesia para almorzar, que justamente se llama El Secreto de la Catedral.
El sitio lo recomiendo, con las bebidas ponen tapa y nos pusieron unas tostas con pisto y queso manchego, buenísimo.
Para comer, nos entramos dentro y pedimos para compartir unas Alcachofas con ventresca de atún y un Tataki de carne. Muy rico todo.
Catedral de Cuenca
Después de comer, la Catedral estaba abierta y entramos para visitarla. Ojo, la entrada cuesta 5,50€ por persona y 1,50€ extra si se quiere subir al triforio.
Nosotros no subimos, además, el carnet de guía de turismo no sirve, por lo que tuvimos que pagar las dos entradas.
La Seo, de estilo gótico, está dedicada a Santa María y San Julián, y fue mandada construir sobre la mezquita después de la conquista de la ciudad por el rey Alfonso VIII.
Actualmente, podemos apreciar su reconstrucción, y su eclecticismo se manifiesta en el claustro, obra de Juan Herrera.
Cada punto importante de la iglesia viene acompañado por un código QR que te explica todo de manera auditiva, la verdad que está muy bien.
Paseando por Cuenca en un día
Después de la visita nos fuimos al alojamiento para descansar y entre tanto, reservamos el freetour con Civitatis a las 20:00.
El punto de encuentro comenzó en la Calle Larga, donde Celia Cruz, nuestra guía comenzó a enseñarnos la ciudad y pudimos admirarla desde uno de sus magníficos miradores.
Después pasamos por el Arco de Bezudo, datado del siglo XVI, conserva un escudo con toisón y es una de las antiguas puertas de la ciudad de Cuenca, que separaban los espacios intramuros y extramuros.
Es el punto más estrecho entre las dos hoces y desde ahí se defendía la entrada a la ciudad desde su parte más alta.
Una vez que pasamos el arco, a la izquierda se encuentra la antigua sede de la Santa Inquisición, actualmente es El Archivo Histórico Provincial de Cuenca, rehabilitado y reconstruido, entre 1985-1990, con destino a Archivo.
Con anterioridad sirvió a distintas instituciones y hechos: Corona, Consejo de la Suprema y General Inquisición, cuartel durante la Guerra de la Independencia y Guerras Carlistas, y finalmente, Prisión provincial.
En definitiva, un lugar emblemático como protagonista directo de trascendentales sucesos de la Historia de España.
De camino al centro
Dirección centro nos paramos en la Iglesia de San Pedro. Levantada sobre una antigua mezquita árabe en tiempos de Alfonso VIII (siglo XIII), debió ser construida con tres naves y torre a los pies, modificándose en siglos posteriores.
Callejeando por la ciudad pasamos por la casa de José Luis Perales y la posada de San José buscando la Plaza Mayor.
Aquí en la Plaza Mayor nos encontramos con el ayuntamiento y la Catedral, lo que pasa que papín y yo ya la habíamos visto después de comer.
Por último y no menos importante, vimos las Casas Colgadas y el Puente de San Pablo iluminados. Una maravilla arquitectónica.
Aunque su construcción se remonta hace seis siglos, la declaración de Bien de Interés Cultural fue el 25 de octubre de 2016 gracias a su arquitectura única y su despunte de balcones salientes en el macizo rocoso.
Situado en mitad de la Hoz del Huécar, el Puente San Pablo sirve de unión entre el Parador Nacional de Cuenca y las sorprendentes Casas Colgadas.
Su construcción fue impulsada para hacer más accesible la llegada al monasterio, hoy convertido en el Parador Nacional de Cuenca.
Así, con el gran Puente de Piedra se consiguió evitar la bajada al barranco del río y la posterior subida a la ciudad.
Y hasta aquí qué ver en Cuenca en un día.
